«No son los tránsitos los que gobiernan el mundo. El programa, en ese sentido, no nos gobierna. No está destinado a ser ni esto ni aquello. Simplemente está ahí. Es algo con lo que convivimos. Es nuestro entorno. Es nuestro tiempo. Y todo acerca de cómo lidiar con ello y manejarlo viene con la madurez.

Hace mucho tiempo que dejamos las cuevas, al menos muchos de nosotros, para procurarnos entornos mucho más cómodos, más controlados, más protegidos. Donde no sentir la maldición de los elementos en el exterior. Como todo lo que tiene que ver con el Diseño Humano, la información es abundante.

La estrategia es algo singular. Siguiendo tu estrategia no vas a ser víctima de los tránsitos. No siguiéndola, no siendo quién eres, vives una vida que no es la tuya, en la que los tránsitos van a gobernar tu vida.

Lo mismo es cierto cuando eres tú mismo. Viviendo en un entorno programado por neutrinos, ser tú mismo conlleva ser lo más sofisticado que puedas ser en términos de tu conciencia. Y en esa sofisticación incorporarás en tu experiencia una protección ante los aspectos negativos de los elementos.

Cualquiera que sea el campo de tránsitos, sea el ciclo que sea, las preocupaciones que deriven de ello ocurren en la mente condicionada, en el afuera, en el no-ser, atrapado en lo que no importa. Pero si te mueves de acuerdo a las mecánicas básicas de tu tipo, si estás viviendo y respetando tu estrategia, verás con bastante claridad que, independientemente del ciclo en el que te estes moviendo, el ciclo es para ti.»

-Ra Uru Hu-